lunes, 21 de enero de 2019

¡¿QUE DEMONIOS...?!


¡¿QUÉ DEMONIOS…?!

Ando apurado…
Voy a llegar tarde al trabajo. Presto como un bólido,
Subo al auto previo apenas sorber un poco de aquel café
(Mi esposa no estaba y tuve que hacerlo). Este tránsito
Está apretado hoy. Ciertamente, no sé si llegaré.

La cola es un desastre. Gracias a Dios, mi jefe es indulgente.
Tiene una paciencia que de dónde la saca yo no lo sé.
Al fin, luego de media hora, el carro ya empieza a moverse
Y hago un suspiro con una mezcla de tedio y poca fe.

Paso el distribuidor. Acelero y le rezo a mi San José
Para que ya no haya más colas que puedan extenderse.
Y justo cuando voy llegando, un Ford Falcón color no sé qué
Tiene la genial idea de, con un autobús, estrellarse.

Siento ganas de gritar. Más, por respeto, decido aguantarme
Ya que el conductor, hombre de cierta edad, mi padre podría ser.
Igual, prácticamente, ya perdí el día. Resuelvo relajarme
Y reviso mis correos en la tableta una y otra vez.

Dos horas más tarde (más una pues me metí por dónde no es)
                                     Llego al estacionamiento y alguien me aborda: “¡Compadre!”
“¿Usted por acá? Pensé que se reincorporaría el próximo mes”

¡Es que me había olvidado por completo! ¡No puede ser!
Estoy de vacaciones hasta Febrero. Hasta mi madre
Y mi esposa me esperan en Acapulco ¡Dios, hay que ver!

AUTOR: ERRM
FECHA: LUNES, 21 DE ENERO DE 2019
ORIGINAL

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